Si tu mamá esta ocupada con todo, ayudala!

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   Mantén tu habitación limpia. Ordena tus cosas y retíralas cuando ya las hayas usado. Si haces un desastre, límpialo.
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   Averigua qué tareas hace tu madre normalmente que podrías hacer tú. Dependiendo de tu edad y tu capacidad, quizás no puedas cocinar una buena cena para tu familia, pero puede que si puedas hacer un almuerzo sencillo.
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   Pregunta a tu madre con qué podrías ayudarla. Probablemente tiene sugerencias sobre cosas que puedes hacer por ella.
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   Reúne al resto de tu familia y organiza un “Día libre de mamá”. Divide los trabajos que tu madre hace normalmente y elige un día para hacerlas, así tu madre tendrá el día para ella.
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   Sigue haciéndolo. Tu madre probablemente trabaja muy duro cada día para ti, así que debería poder disponer de tu ayuda siempre que puedas ofrecérsela.
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   Ayuda siempre a tu madre y estará muy contenta. Ya que contaría contigo, es menos trabajo para ella!
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   Si tu madre te pide ayuda, ¡no te quejes y ayúdala! No te preguntaría si de verdad no necesitara tu ayuda.
8. Consejo:

• Haz cosas para ayudar que se te ocurran y hazlas antes de que ella te lo pida. Ella no te pedirá que hagas nada que tú no sepas hacer.

                    

                Advertencia:

• No intentes sorprender a tu madre haciendo una tarea que no has hecho nunca antes. Si lo haces mal, puedes provocar que tu madre tenga aún más trabajo que hacer.
• Cuando pienses que estás ayudando a tu madre gritando y ordenando a tus hermano, en realidad le estás causando más estrés a tu madre porque esto siempre acaba en discusión.